En los últimos años ha habido un aumento explosivo de pacientes muy obesos que han buscado en esta alternativa terapéutica una forma de perder peso de manera más significativa y permanente, que con el tratamiento médico tradicional.
Se basan en 2 fundamentos.
a) restricción gástrica (en la banda gástrica o en las distintas formas de gastrectomía) que limita la cantidad de alimentos que caben en el estómago y
b) técnicas de disminución de la absorción de nutrientes (en las distintas formas de bypass o derivaciones intestinales).
Así los tipos más comunes de cirugía bariátrica actualmente en uso son:
- Banda gástrica ajustable: Se coloca una banda en la parte superior del estomago para crear un saco donde quepa una pequeña cantidad de alimento. El paso de la comida al resto del estómago se cambia posoperatoriamente ajustando el diámetro de la banda.
- Gastrectomía vertical en manga: se realiza gastrectomía parcial que elimina el fondo gástrico y mantiene el vaciamiento normal del estómago a través del píloro
- Bypass gástrico y derivación en Y de roux: Se reduce el tamaño del estomago y también se desvía el tracto digestivo para que los alimentos no pasen por gran parte del estomago y de la porción inicial del intestino delgado.
- Existen otras formas de uso menos frecuente como la derivación biliopancreática y el switch duodenal.
Los beneficios de estas formas de cirugía han sido varios: principalmente la baja de peso progresiva y sostenida de una gran proporción de los pacientes y por otro lado la mejoría de patologías metabólicas asociadas a obesidad con diabetes mellitus 2, dislipidemia, hígado graso e hipertensión arterial. Sin embargo no está exenta de riesgos, los cuales deben ser conversados con su médico tratante antes de tomar una decisión y pueden ser complicaciones postoperatorias inmediatas, como también a largo plazo, asociadas a deficiencias nutricionales (como edemas, anemia, osteoporosis, neuropatías, fatiga crónica, etc.) e hipoglicemias recurrentes. La prevención de estas complicaciones requiere de un seguimiento médico de por vida.
Por último es necesario saber que el resultado no es igual en todos los pacientes y que se necesita en forma permanente de hábitos de vida saludable (en alimentación y ejercicio) si se espera obtener buenos resultados
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